Se ha caído tu sombra.
En tu sombra escondías el aburrimiento y la monotonía, a la sombra mantenías frescos los deseos, como si aún fuesen jóvenes y desde la sombra salían corriendo para lanzarse al mar. Refugiado en tu sombra veías pasar a los que iban al sol, nadie tenía una sombra como la tuya y te sentías orgulloso. Era única. Una sombra frente al mar donde ibas cuando querías y te escondías a soñar.
Y un día llegas contento a buscar tu sombra y ves que se ha caído, es raro porque no ha habido un temporal, no ha subido el viento ni las olas, es como si la sombra se hubiese tirado por los suelos cansada ya de estar en pie.
Entonces miras atrás y recuerdas las otras sombras de tu vida, aquellas que en otro tiempo te abrazaron, las que habías olvidado y que también fueron cayendo.
Preciosas fotos. No te preocupes mucho, vendrán otras sombras nuevas si avanzas, lo se por experiencia, hay mas playas y mas sombras. Aunque cada vez quedan menos veranos, me has recordado que tengo que ir a buscar una sombra nueva yo también.
ResponderEliminarBueno, anónimo, quedan menos veranos. Éste acaba de empezar. Habrá que intentar disfrutarlo. Con una buena sombra si es posible, y si no, al sol.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y por los ánimos, más playas y más sombras, es cierto...