sobre las cosas del vivir
martes, 26 de junio de 2012
el sueño del otro...
Para recordar los recuerdos de los otros hace falta mucho amor. Para soñar los sueños de los otros hace falta enamorarse.
Amar, cuando el amor es el aire que se respira, es soñar el sueño del otro, lanzarse al sueño como si fuese tuyo, convertirte en el sueño del otro porque el otro, al que tú has elegido para soñar, te sueña a ti. Entonces tú te sueñas como un sueño y ya no eres tú, no son tus ojos ni es tu piel. No piensas como tú, algunas veces no hablas como tú, hablas como habla el sueño del otro, tienes la edad que tiene el sueño del otro, que no es la tuya. Seguramente en el sueño del otro eres siempre más joven y más hermoso, eres más bueno y más inteligente, más divertido. En el sueño del otro eres el sueño de ti mismo que ya no te atreves a soñar. Al amar puedes soñarte así, como te soñaste entonces, cuando la vida te abría todas las puertas y aún creías en tus sueños.
El otro te hace amar-te, sueñas su sueño, que es el tuyo. Por eso el amor hace feliz. Por eso el amor, cuando es el latido que te devuelve a la vida, no dura mucho. Porque es un sueño.
El desamor es el despertar del sueño del otro.
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Creo que entiendo lo que dices, a mí se me fue el sueño muy pronto y no he vuelto a soñar...
ResponderEliminarAunque, ya sabes, para soñar nunca es tarde...
ResponderEliminar...
ResponderEliminarYo sueño. Son unos sueños en semivigilia y en mis sueños aparece ...
ResponderEliminar...el sueño del otro que también sueña?
EliminarLeí:
ResponderEliminar¿Cuál fue la hora que esperamos tanto
que vino al fin y no reconocimos
y se nos dio para soñar el sueño
que nunca nos había visitado?
(de Z)