sobre las cosas del vivir



jueves, 12 de septiembre de 2013

la libertad...




Hace Montaigne una lista que lo ayude a liberarse de todo lo que lo molesta, lo refrena, lo limita:

Liberarse de la vanidad y del orgullo, que es tal vez lo más difícil.
Evitar la presunción.
Liberarse del miedo y de la esperanza, de la fe y de la superstición, de las convicciones y de los partidos.
Liberarse de las costumbres: "El uso nos hurta el verdadero rostro de las cosas".
Liberarse de las ambiciones y de toda forma de codicia: "La reputación es la más inútil, vana y falsa moneda de la que nos servimos".
Vivir libre de la familia y del entorno, libre del fanatismo: "Cada país cree poseer la religión más perfecta".
Libre frente al destino: somos sus amos, nosotros otorgamos color y aspecto a las cosas.
Y la última libertad:
Frente a la muerte. "La vida depende de la voluntad ajena; la muerte de la nuestra. La muerte más voluntaria es la más hermosa".

Ahí está.
La libertad...



2 comentarios:

  1. Busco la libertad, en todo lo que Montaigne nombra. La consigo por capas... Por capas me voy deshaciendo del orgullo, de la vanidad, del miedo, no tanto de la esperanza, sí del entorno, de las costumbres, de los rituales, mi fe está rota pero resucita usando otros nombres...

    Un día puedo vaciarme de todo eso. Pero a veces vuelve.

    La reputación la tengo a raya. Soy anónimo.

    Qué más?
    La muerte voluntaria.

    Es la más hermosa? A veces creo que sí, en mi imaginación.

    Y tú, cómo interpretas eso de "Más hermosa"?

    :

    De mi experiencia. Me ha tocado ser quien queda del lado acá de la decisión de morir que eligió alguien a quien amo. Desde este lado no la he visto hermosa.

    Tampoco conquisté la libertad de sentir que me importa un cuerno su muerte. Y eso que respeto la decisión de morir.

    Tendré que esperar a que se quiebren más muros en mi forma de sentir para un día sentir nada, solo hermosura.

    (Como diría Deleuze hoy tu escrito y mi realidad hicieron máquina).

    :

    Piensas en morir para ser libre?

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  2. También hacen máquinas la lista de Montaigne y mi realidad. Por eso lo escribí porque yo también lo intento, por capas, como dices tú y como tú dices algunas veces creo que lo consigo y otras vuelven a cubrirme y a hacerme menos libre la vanidad o el orgullo, el entorno, la costumbre, lo que creo que es el destino. Pero intuyo que Montaigne tiene razón.
    Siempre he creído y defendido en la libertad de morir y pienso que la muerte voluntaria es la más bella, al menos lo más bello es saber que existe esa libertad, aunque la religión, la sociedad, incluso la ley se han empeñado en robarla, la libertad de morir.
    Por supuesto que si ha muerto alguien a quien amas no te resulta bello, debe ser espantoso y triste, no puedes pretender que te importe un cuerno, eso no te haría más libre, pero sí puedes amar tanto a quién usó su libertad que te le alegras que lo haya conseguido, te alegras por él, no por ti, tú no eres tan importante como él.

    Te voy a contar algo que le he contado a gente que me conoce. Me dijo mi madre que con 6 años le dije por primera vez: mamá por qué me has hecho vivir? Por qué no me preguntaste si quería nacer?, si me hubieses preguntado hubiese te hubiese dicho que no. mi madre me amaba mucho y sufría enormemente cuando yo le decía eso, yo no he tenido hijos pero puedo entender ese sufrimiento.
    Yo era una niña feliz, después he tenido una buena vida pero sigo pensando lo mismo, hubiese preferido no nacer. Me consuela la libertad de morir, no me concedieron la libertad de no haber vivido,
    Pero todo esto que te digo no significa, como mucha gente cree que haya tristeza o depresión en este pensamiento, es como lo ve Montaigne, el uso de otra libertad, la más grande, bella, incluso alegre...

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