sobre las cosas del vivir
jueves, 4 de abril de 2013
caballos rojos...
Hace poco, después de una cena entre amigos, me dejé llevar por la pasión en el sentir y el hablar, (me pasa a menudo y después me arrepiento casi siempre), estaba hablando de lo que habían progresado mis alumnos, me siento muy orgullosa y comencé a enseñar fotos de los dibujos que hacían hace sólo unos meses y de los que hacen ahora, alguien al verlos dijo que no parecían reales. Como estoy acostumbrada a arrepentirme cuando me dejo llevar por la pasión en el sentir y el hablar respondí que sí, que tenía razón, que no eran reales, dejé de enseñar fotos y cambié de tema, pero me quedé pensando que es justo eso lo que intento enseñarles a mis alumnos. Hay una anécdota que repito en clase, porque antes de aprender es normal que ellos pretendan hacer dibujos que parezcan reales sin comprender aún los otros parámetros que les intento transmitir.
En una exposición un crítico de arte le dijo a Matisse, "¿Dónde se han visto caballos rojos con la crin azul?." Matisse contestó, "Señor, ¿no se ha dado usted cuenta de que lo que está mirando no son caballos? Éso es un cuadro".
Estoy aprendiendo a no dejarme llevar por la pasión en el sentir y el hablar, no siempre lo consigo, pero nunca es tarde para aprender, o al menos para intentarlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Para mi son caballos. Reales. Es un alivio que existan esos mundos donde los caballos son rojos y sus crines azules...
ResponderEliminar:
En cuanto a la pasión en el sentir y en el hablar, te entiendo más de lo que puedas imaginar...La parte del arrepentimiento también.
Ese tipo de arrepentimientos he aprendido a soltarlos enseguida, como si fueran globos. Vayanse lejos!
Prefiero el impetu del sentir y del hablar que el corset, del mismo modo que prefiero la inspiración a la falta de aire.
Sí, el arrepentimiento hay que soltarlo como globos, pero también hay que aprender. No es un corsé ni falta de aire, es que los caballos rojos no pueden galopar en todas las praderas.
EliminarGracias por dialogar conmigo.
You are welcome.
EliminarVolviendo al tema "arrepentimiento" del sentir y del hablar. Tres preguntas.
Qué te molesta tanto de esa pasión de la que hablas?
Y por qué te lleva a arrepentirte?
Aprendes alguna vez de ese tipo de arrepentimiento?
Gracias por contestar.
Respuestas:
EliminarCuando me dejo llevar por esa pasión en el sentir y el hablar y veo que los que me rodean en ese momento no me entienden, comprendo que no siempre conviene dejarse llevar, y me arrepiento porque se pierden muchas energías y no se llega a nada. Aprendo mucho del arrepentimiento aprendo a discernir cuando es productivo y enriquecedor hablar y sentir y cuando es mejor callar.
Gracias de nuevo, ahora por preguntar.
Vive la liberté! Por favor, sigue siendo impulsiva, yo te agradezco tanto que lo seas...!
ResponderEliminarIncluso cuando meto la pata? Tú sabes que meto la pata... Intento ponerles riendas a los caballos rojos, pero no creo que lo consiga del todo. Vive la liberté!!!!!
Eliminar