sobre las cosas del vivir



martes, 29 de enero de 2013

el salón...



Era hermoso aquel salón, con tantos cuadros antiguos, muebles de maderas nobles y alfombras persas. Las cortinas eran de terciopelo y los sillones estaban tapizados con sedas. Sobre el aparador había candelabros de plata, figuras de marfil y un jarrón siempre con flores frescas.

¿Por qué (sin tener la edad) sentía entonces tanto remordimiento, tanta pena y tanta vergüenza?


6 comentarios:

  1. Me inquieta el texto...espero comentarlo en privé

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    1. Me encantaría, siempre me gusta hablar contigo

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  2. En una jaula de oro un pájaro libre puede morirse de pena.

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    1. Quizás sea ese el motivo, muchas gracias, anónimo.

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  3. A mi también me inquieta el texto, pero de intriga.
    Del otro lado del mundo y con mi status extranjero, imagino esta trama:

    Una niña con un don.
    Y un salón poblado de espíritus que instalan en las emociones de ella sus historias de silencio.

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    1. Esa es la trama... es curioso que desde el otro lado del mundo seas capaz de leer las historias de silencio.

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